El proceso de toma de decisiones juega un rol fundamental en el éxito de las organizaciones. En este sentido, los datos representan un valioso recurso para generar estrategias y planes eficaces que permitan alcanzar los resultados esperados. En particular, la agricultura inteligente destaca por obtener y hacer uso de data para facilitar un mejor desempeño en las diferentes actividades de cultivo.
Optimiza tu predio con agricultura inteligente
En la búsqueda de métodos innovadores que permitan un mayor rendimiento y calidad en los cultivos, la agricultura inteligente utiliza herramientas tecnológicas principalmente ligadas a las Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC) e Internet de las Cosas (IoT) para captar datos de las diferentes variables involucradas en los procesos agrícolas (agua, suelo, clima, entre otros) en tiempo real, que son almacenados y procesados para una eficiente toma de decisiones.
Así, este tipo de agricultura pretende hacer frente a los graves efectos del cambio climático como las sequías y degradación de los suelos que ponen en jaque la difícil misión de alimentar a los miles de millones de personas que habitan el mundo. De hecho, se prevé que en la próxima década el consumo de alimentos a nivel mundial crezca en un 1,4% anualmente, motivado fundamentalmente por el aumento de la población.
Beneficios de la agricultura inteligente y las decisiones Data Driven
Mediante su avanzado sistema de recolección, procesamiento y análisis de datos, la agricultura inteligente ofrece tomar decisiones basadas en esa información o Data Driven, lo que permite::
Mayor eficiencia y productividad
La agricultura de precisión, optimiza el empleo de los recursos requeridos para el cultivo, como, por ejemplo, fertilizantes, combustibles fósiles, herbicidas, pesticidas y agua, a través de sus funciones de monitoreo y control de datos de las principales variables de las actividades propias del sector.
Este hecho cobra especial relevancia en el caso del cuidado de los recursos hídricos, considerando que, ante su escasez, se están generando cambios en las asignaciones para priorizar el consumo humano por sobre las actividades de sectores productivos como la agricultura, a la que actualmente se destina un 70% del agua dulce del mundo.
Mejor intercambio de información
Este sistema de gestión, basado en el internet de las cosas, conexiones digitales y sistemas de monitoreo en tiempo real, facilita el acceso a valiosos datos relacionados con la agricultura y sus actividades que permiten mejorar el rendimiento de los cultivos, destacando, entre otras cosas, la información vinculada a las diversas variedades de semillas, tipos de plagas, fertilizantes, pesticidas, condiciones del suelo, factores climatológicos y red de distribuidores.
Conocimiento del mercado
La agricultura inteligente puede aportar información relevante sobre el comportamiento de los productos en el mercado, otorgando a los agricultores una visión más clara sobre el real valor de sus cultivos y, así, obtener una ganancia justa por su trabajo.
En este aspecto, por ejemplo, los productores pueden conocer de mejor forma las necesidades y preferencias de sus clientes, permitiendo ajustar sus estrategias de producción y comercialización para alcanzar mayor rentabilidad.
Mayor nivel de predictibilidad
Los cultivos demandan condiciones adecuadas para alcanzar su máximo rendimiento, ya sea en materia de suelo, tipo de cultivo, variedad, temperatura, entre otros factores a considerar. En este escenario, la agricultura inteligente permite una mejor planificación mediante registros históricos de información, que establezcan el contexto ideal para que los cultivos se desarrollen óptimamente.
De este modo, se puede, por ejemplo, controlar eficientemente los períodos de siembra y cosecha de algún tipo de planta específica según los rangos de temperatura que mejor se adapten a su cultivo.
Menor impacto en el ecosistema
En la actualidad, muchas industrias se ven condicionadas en sus operaciones al tener que ajustar sus procesos a las normativas medioambientales vigentes, producto del daño que representan para el entorno. Por ejemplo, el sector agrícola y ganadero emite un poco más del 10% de los GEI en Chile.
El uso de dispositivos como sensores, drones y satélites, permite obtener valiosa información para una mejor gestión del ecosistema de los cultivos, que implique, entre otras cosas, no intervenir de forma agresiva los suelos, reducir el nivel de desperdicio de agua y elegir acertadamente semillas y fertilizantes que permitan disminuir el impacto sobre calidad de los terrenos.
Elements: sistema ideal para avanzar hacia una agricultura inteligente
En el objetivo de mejorar el rendimiento y competitividad de tu campo por medio de la agricultura inteligente, tienes la opción de asesorarte con expertos en el empleo de esta tecnología que te permite gestionar de manera fácil y eficiente los recursos hídricos de tu predio, cumpliendo con la normativa hídrica vigente.
Además, la interfaz que integra nuestra solución te posibilitará visualizar activos, recibir alertas personalizadas y tener acceso a datos históricos de variables como caudal, volumen y nivel freático. No esperes más para obtener los resultados del uso de Elements en tu predio agrícola.
